Om Öresundskraft på spanska
Has oir tu voz el 12 de enero, vota NO a la venta de Öresundskraft
Vota no porque:
• Los ciudadanos de Helsingborg deben ser dueños de su compañía energética.
• Las ventas provocan alzas de precios.
• Se necesita una sociedad sostenible ahora. El referéndum sobre la venta de Öresundskraft tendrá lugar el domingo 12 de enero de 2020. Votación anticipada del 2 al 12 de enero.
Los ciudadanos pueden influir en lo que el municipio posee. El experimento burgués de privatizar las funciones de apoyo a la comunidad ha estado sucediendo por demasiado tiempo. Es hora de decir ¡no! Servicios sociales comunales.
Para un futuro sostenible
Los ciudadanos de Helsingborg deben seguir siendo dueños de su compañía energética. Los ciudadanos pueden influir en lo que el municipio posee. Un propietario privado tiene un interés lucrativo como meta. No satisfacer las necesidades de la gente. Si vendemos la empresa no podremos influir en quienes serán los futuros propietarios ni qué necesidades estos satisfará. Hoy tenemos una empresa que satisface las necesidades del municipio. Es una empresa que conocemos y que quiere desarrollar nuevos métodos, con tecnología inteligente y segura para garantizar nuestro suministro de energía, hoy y en el futuro. Se ha demostrado que las ventas provocan alzas de precios. La historia habla en un lenguaje claro. Los municipios que han vendido sus compañías de energía a compañías privadas se han arrepentido ya que la venta les significó una pérdida total. Como prueba tenemos Malmö, Uppsala, Estocolmo, Enköping y Falköping. Vender compañías de electricidad aumenta los precios
Por una sociedad sostenible
Estamos ante un gran cambio climático. Debemos hacer un cambio en la sociedad. Öresundskraft está a la vanguardia ofreciendo una tecnología inteligente por una sociedad sostenible. Para que podamos hacer una transición justa para que el sector privado asuma su responsabilidad necesitamos que los ciudadanos participen en la orientación del cambio social por medio de decisiones democráticas. Esto en lugar de simplemente esperar a que los propietarios privados se decidan a impulsar un desarrollo sostenible.